La cultura de tomar maguey espadín

y la “moda” de los agaves silvestres

 

 

Si bien la popularidad del mezcal ha ido creciendo en años recientes; lo cierto es que no todas las personas que lo consumen conocen a fondo la cultura que hay detrás de éste. Es por esto que, aunque no es requisito, en Mezcal Cómplice creemos que conocer más de los procesos de elaboración y estar al tanto de la industria mezcalera hace que la experiencia de tomar este destilado sea más enriquecedora y que, quienes lo consumen, podrán tomar decisiones más responsables a la hora de escoger entre los diferentes tipos de mezcal.

¿A qué nos referimos con elegir responsablemente?

La demanda por destilados de agaves silvestres o poco comunes ha puesto en peligro a muchas de estas especies, las cuales son difíciles de cultivar debido a que son cortadas antes de alcanzar la edad suficiente para florecer o dar hijuelos, puesto que, cuando lo hacen, ya no cumplen los requisitos para ser convertidas en mezcal. Por eso, cuando consumimos mezcal elaborado con espadín, estamos cuidando toda la variedad de agaves que enriquecen la cultura mezcalera. Ésta es nuestra manera de proteger lo que nos apasiona y nos da identidad.

Sin embargo, hay muchas más razones para preferir el consumo de mezcal elaborado con espadín. En primer lugar, comparado con otros agaves, el maguey espadín es de ingesta muy noble y permite consumir su mezcal sin las molestias gastrointestinales que pueden provocar otras especies por su grado de acidez. Su sabor suave permite, además, disfrutar más las notas ahumadas, amaderadas y frutales que hereda del proceso de cocción, destilado y reposo.

Cabe destacar también que, al ser cultivado, los productores tienen un mayor control del proceso de elaboración desde el inicio, lo que se traduce en estándares de calidad que, en el caso de Mezcal Cómplice, aseguran el seguimiento de un proceso 100% orgánico y artesanal.

Por último, su cultivo y consumo permite que otras especies silvestres sean protegidas y estudiadas para su reproducción, como es el caso del maguey coyote, que actualmente ya es cultivado.

¿Por qué, entonces, si es mezcal de maguey espadín, cuesta tanto?

Mucha gente tiene la creencia de que “en Oaxaca es más barato el mezcal”, y tienen razón. Cuando uno visita Oaxaca y compra mezcal, la ganancia en su totalidad es destinada a los productores. Sin embargo, cuando se trata de un mezcal que se vende fuera de su lugar de origen, ya sea dentro del mismo país o para su exportación al extranjero, debes tomar en cuenta que las ganancias se dividen entre productores, costos de envasado y etiquetado, costos de transportación, trámites, eventos para presentar la marca, campañas de marketing, y los sueldos de todas las personas que intervienen en estos procesos.

Ahora que ya lo sabes, ¿qué Cómplice vas a elegir hoy?